El mercado mundial de plataformas low code y no code superará los 36 mil millones de dólares para 2027 y es ya una tendencia en la actualidad.
En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados y en donde la transformación digital se acelera a una velocidad sin precedentes, las pequeñas y medianas empresas están buscando su hueco.
Pero no resulta fácil. La falta de recursos y, a veces, de conocimientos, las impide competir en igualdad de condiciones con empresas grandes que pueden destinar recursos y tiempo a investigar e implantar nuevas herramientas digitales a sus procesos y negocios.
Es aquí donde surge una nueva tendencia que está llamando la atención de muchos. Las herramientas de programación no code y low code se perfilan como los catalizadores de una nueva revolución tecnológica donde se está democratizando la creación de aplicaciones, allanando el camino para que las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) irrumpan con fuerza en la arena tecnológica, desafiando las barreras tradicionales de recursos y conocimientos especializados. Junto con la inteligencia artificial (IA), han emergido como un tándem que está transformando radicalmente el panorama empresarial y está permitiendo a las PYMEs colocarse en el carril rápido de la innovación.
La programación no code es un enfoque que permite a las personas desarrollar aplicaciones informáticas sin la necesidad de escribir código tradicional. En esencia, es el LEGO de la era digital.
En lugar de requerir conocimientos profundos de lenguajes de programación, estas plataformas proporcionan interfaces visuales e intuitivas donde la lógica y la funcionalidad se ensamblan como piezas de LEGO, simplificando enormemente el proceso de desarrollo.
Como si de un juego de bloque de LEGO se tratara, en la programación no code permite construir estructuras complejas a partir de componentes sencillos y modulares, la programación no code posibilita la creación de aplicaciones sofisticadas sin necesidad de escribir código línea por línea.
A su vez, las plataformas low code representan el siguiente escalón en esta evolución, ofreciendo un mayor grado de personalización y flexibilidad. Aunque requieren un conocimiento básico de programación, reducen significativamente la complejidad y el tiempo de desarrollo, permitiendo a los usuarios con una formación mínima crear aplicaciones robustas y a medida.
El tándem de la programación no code y la inteligencia artificial (IA) está emergiendo como una fuerza transformadora, desbloqueando un potencial sin precedentes en el ámbito empresarial.
La IA actúa como un asistente digital avanzado, capaz de aprender, adaptarse y automatizar procesos, lo que multiplica exponencialmente las capacidades de las PYMEs para innovar, adaptarse y prosperar en un mercado cada vez más dinámico y competitivo.
Con la programación no code y la IA, las PYMEs pueden crear y adaptar aplicaciones y procesos empresariales con una velocidad impresionante para mantenerse ágiles y responder a las cambiantes demandas del mercado.
Gracias al uso de IA, se puede liberar a los equipos tareas automatizables para centrarse en tareas de mayor valor. También ayuda a analizar datos y proporciona insights valiosos para que las PYMEs tomen decisiones informadas y se anticipen a las tendencias.
La programación no code elimina la necesidad de invertir grandes sumas de dinero en el desarrollo de aplicaciones, permitiendo a las PYMEs asignar recursos financieros de manera más eficiente. Además, les otorga una ventaja competitiva al poder crear y lanzar aplicaciones a gran velocidad,
Otra de las ventajas del no code es que se pueden desarrollar aplicaciones sin depender de terceros para realizar modificaciones o actualizaciones, lo que les brinda un mayor control sobre los recursos tecnológicos.
Uno de los campos más prometedores de aplicación de estas tecnologías es el sector de la salud. La realidad virtual (RV), en combinación con las plataformas no code, está redefiniendo los paradigmas del tratamiento y la rehabilitación. Mediante la creación de entornos inmersivos y personalizados, los pacientes pueden sumergirse en experiencias terapéuticas que antes eran inimaginables, abriendo nuevas vías para el tratamiento de trastornos y enfermedades.
Más allá del ámbito de la salud, la realidad inmersiva y la programación no code están abriendo horizontes en sectores como la educación, el comercio minorista y el entretenimiento. Las experiencias inmersivas, enriquecidas con la capacidad de programación intuitiva, están permitiendo a las empresas ofrecer productos y servicios altamente personalizados, creando conexiones más profundas y significativas con sus clientes.
El mercado de programación no code está en crecimiento. Empresas líderes en tecnología, como Google, Microsoft y Salesforce, han reconocido el potencial de la programación no code y están realizado inversiones significativas en plataformas y herramientas no code.
Esta competencia en el mercado está impulsando la innovación y mejorando constantemente las soluciones disponibles, beneficiando a las PYMEs al ofrecerles una gama más amplia de opciones.
No es casual, la falta de desarrolladores cualificados es la palanca perfecta. La consultora Gartner estima que el mercado de bajo código crecerá hasta casi los 30.000 millones de dólares en 2025. Se prevé que sólo para 2024, las aplicaciones desarrolladas con low/no code representará el 65% de toda la actividad de desarrollo, superando el 70 % para 2025.
Sin embargo, estas tecnologías no están exentas de desafíos.
Las cuestiones relativas a la seguridad, la privacidad y la ética requieren una atención meticulosa. Además, aunque la programación no code y low code facilitan el acceso a la creación de aplicaciones, no sustituyen la necesidad de conocimientos especializados en ciertos escenarios, especialmente en aquellos que requieren una alta personalización o manejo de complejidades técnicas avanzadas.
En este contexto, el rol del programador evoluciona. Lejos de quedar obsoleto, el programador se transforma en un arquitecto de soluciones, un estratega capaz de navegar en el vasto mar de posibilidades que las plataformas no code y low code ofrecen, seleccionando, personalizando y optimizando herramientas para crear soluciones que no solo resuelvan problemas, sino que también innoven y lideren en el mercado.
Además, la seguridad de las aplicaciones no code debe ser una preocupación constante.
En cualquier caso. La programación no code ha venido para hacer el mundo más fácil a no programadores. Al liberarse de las tareas técnicas complicadas de programación, las PYMEs pueden concentrarse en lo que hacen mejor: impulsar su negocio y atender a sus clientes.
Estamos en el umbral de una nueva era, donde la habilidad para manipular y transformar datos se convierte en un superpoder.
Al igual que los alquimistas medievales soñaban con convertir metales comunes en oro, los alquimistas de datos de hoy tienen el poder de convertir información en conocimiento, conocimiento en acción y acción en innovación. En este emocionante viaje, los bloques de LEGO no solo son un juego de niños, sino también las piezas fundamentales que, en manos de los visionarios, están construyendo el futuro de nuestro mundo digital.
Pero recuerde, salvo que usted sea un chef excelente, es posible hacer un plato al gusto exquisito, pero si busca una receta exclusiva y digna de un premio de cocina, siempre deberá acudir a un maestro cocinero. Lo mismo sucede con la programación.
